jueves, 24 de febrero de 2011

Lost: Los Sueños en la Isla


Con Mr. Eko, se ratifica una vez más la importancia de los sueños en la Isla. Esa es una de las constantes en la serie, en diferentes personajes, en algunos con más significación que en otros y desde el inicio de las temporadas.

Los sueños es un aspecto primordial de diferentes líneas psicológicas freudianas, pero sobre todo del análisis Jungiano. Los sueños son una entrada al inframundo, al mundo del inconsciente, a ese espacio al que volvemos inexorablemente y con alivio todas las noches con el fin de restaurar nuestro equilibrio físico y sobre todo el psíquico.

Es el reino de Hades, es el reino de lo mitológico, donde encontramos la clave y la vía de una posible comprensión de nosotros y abrir una puerta a crear un posible sentido a nuestra vida y a veces a nuestro mundo. Cada cultura le ha dado un nombre desde su respeto-miedo, desde su necesidad: el mundo de los muertos, el Nagual, el Inframundo, el Inconsciente.

Un espacio virtual, invisible del que realmente sabemos MUY POCO, apenas pinceladas, algunos atisbos; pero que los diferentes modelos culturales y científicos empíricos nos han aportado bastantes mapas, aunque nos sea imposible conocer el territorio o vislumbrar mínimamente que es. La física nuclear, la cuántica tienen un objeto de estudio con características muy similares: es invisible, sólo podemos ver sus efectos indirectos, sólo podemos afinar postulados e hipótesis que mejoren nuestro conocimiento de él.

La maldición que padece la Psicología profunda, es que a pesar de su ciencia empírica, de sus metodologías demostrables y eficaces, padece la sospecha de lo religioso, de lo metafísico, de las ciencias fenomenológicas y claro, este mundo racionalista, plano, de la medicina de la evidencia, de la ciencia de resultados estadísticos, no puede …o no quiere evaluar una dimensión o un mundo de 4 dimensiones, sólo quiere la evidencia del mundo de tres dimensiones: espacio, tiempo y gravedad….todos lineales, todos medibles…los tres limitados por su propia burbuja de definición.

El resto del universo no medible, no visible, no constatable…muy fácil, sencillamente NO EXISTE.

Pero curiosamente, esta serie que no pretende ser de misterio, de fantasía, de ciencia-Ficción, no se la puede clasificar y encasillar; pero con su trama se convirtió en un hito mediático, sociológico y filosófico durante seis años, donde cupo desde lo mas freaky hasta intentos de comprensión serios, como el que pretendemos en este blog.

Es decir, continuar con algunas respuestas que habrán el espacio a mas preguntas, pues el estar consciente a la vida es la oportunidad de poder hacer preguntas continuamente permitiéndonos abrir posibilidades de comprensión, de nosotros y del mundo en que habitamos.

Desde ese estar consciente, en la Isla, en esa precisa Isla, todo tiene un segundo sentido, todo tiene una cuarta mirada, una cuarta dimensión. No sirve el espacio, el tiempo, la gravedad…física y de los hechos; el filo de lo improbable o lo casi imposible se teje como una red sobre todo y sobre todos, sean náufragos o los otros, nadie se libra de esa red. Red que de forma simbólica atrapó a Jack y Kate, o más aun a Michael, de forma más dramática en la búsqueda de su hijo, trayéndole locura de amor y muertes.

Estamos ya cerca del final de esta segunda temporada y el devenir de nuevos acontecimientos se empieza a disparar, los eventos a crear más dicotomías y sincronicidades, a disparar mas lo mítico y extraño de ese viaje naufragado que todos padecemos sea dentro o fuera de la Isla.

Jose López 24/02/2011

No hay comentarios:

Publicar un comentario